Queque/ Bizcocho de dulce de leche

 

Sin duda, si me preguntan sobre mis sabores favoritos, no puede faltar el dulce de leche. Y, claro, tampoco puede faltar un queque con sabor a dulce de leche, y es que los queques admiten muuuuuchos sabores, no se puede pedir mas, yujuuuu!!!

Ingredientes:

•  3 huevos medianos
• 75 gramos de mantequilla fundida
• 200 gramos de dulce de leche
• 250 gramos de harina simple de trigo
• 1 sobre de levadura tipo Royal
• 80 gramos de azúcar moreno
• 75 ml de nata
  

Horno, 180 º,  30 minutos.

Pasos:

Simplemente integrar los ingredientes, primero los ingredientes húmedos, la mantequilla, el dulce de leche, la nata y los huevos. Luego la harina y la levadura tamizada, y por último el azúcar.

Lo pasamos al molde y para el horno. No nos olvidemos de pincharlo con un palillo para comprobar que está hecho, para eso debe salir limpio.

 

 Lo dejamos enfriar en el molde encima de una rejilla 10 minutos para luego desmoldarlo y dejar que se enfríe del todo. Listo, a disfrutarlo!!!

Macarons

Desde que vi los macarons por primera vez me enamoré de ellos, son tan bonitos, y los colores... quedan muy chic. Mi marido me regaló un kit especial para hacer macarrones con una manga y un molde especifico ya que se me hacía muy difícil echar la masa en el papel y que éste quedara bien. Luego me compré el libro para mí imprescindible de los macarons, el de Annie Rigg, de ahí saco la receta.

Ingredientes:

• 200 gramos de azúcar glas
• 125 gramos de claras de huevo pasteurizadas (unos tres huevos)
• 100 gramos de almendras molidas o harina de almendras
• Una pizca de sal
• 40 gramos de azúcar

Horno, 180º, 10 minutos.

Pasos:

Lo primero es tener paciencia y no desanimarse si no salen a la primera. A mí me resultan difíciles de hacer y nunca me quedan perfectos.

Ponemos el azúcar glas y la harina de almendra en el bol y con las varillas de mezcar removemos durante 30 segundos. Yo tamizo la harina para que queden los menos grumos posibles.

Echamos las claras de huevo en otro molde, añadimos la sal y las batimos a punto de nieve.

Sin dejar de batir, a media potencia, vamos añadiendo a cucharadas el azúcar blanca. Hay que esperar a que se incorpore del todo una cuchara para poner la siguiente. La mezcla tiene que ser compacta y brillante.

                                               

Añadimos a esta mezcla el colorante que queramos.

Con una cuchara grande de metal, incorporamos la mezcla de azúcar a la de harina y almendras a la otra. Tiene que quedar homogéneo y sin grumos.

La masa la ponemos en una manga pastelera, si no tenemos el molde especial, cogemos papel de horno y le dibujamos circulos de unos 5cm de diámetro. Echamos un poco de masa en cada círculo, no demasiada porque se saldrá, tiene que quedar de forma redonda.

Dejamos la masa ya en el molde entre 15 minutos y una hora, hasta que cuando lo toquemos  no esté pegajoso ni húmedo.

                                              

Lo metemos en el horno unos diez minutos, hasta que la parte de arriba esté crujiente y la de abajo seca.

Ya están listos, ahora solo hay que dejarlos enfriar para rellenarlos con ganaché, buttercream o lo que queramos.

Dedicada:

A mi marido, que es una devorador de macarons, le encantan.

Galletas Halloween

Tenía una fiesta en Halloween y no sabía que llevar, hasta que me decidí por unas ricas galletas y unos macarons. Con esto siempre quedamos bien ;-).

La receta de las galletas es la receta básica de galletas de vainilla que utilizo para las galletas decoradas, ya sea con glasa real o con fondant.

Ingredientes:

a) Galletas de vainilla caseras (ver receta en otro post)

b) Glasa Real (eso que lleva por encima las galletas para decorarlas).

•  Claras de huevo pasteurizadas
• Azúcar Glass
• Diferentes colorantes en pasta

Yo pongo las cantidades de las claras y el azúcar glass a ojo así que no sabría decir cuánto uso, además depende del número de galletas a decorar, y por cierto, más vale que sobre que falte ya que se usa bastante glasa.

c) Galletas de dedos

• Almendras enteras
• Colorante rojo y marrón
• Pegamento comestible (por si se despega alguna almendra)

Pasos:

Para la GLASA REAL 

 Primero pongo las claras de huevo pasteurizadas y voy añadiendo el azúcar glass lentamente a fin de conseguir la textura que busco.

Hay que hacer glasa de dos tipos, la del borde de las galletas, más consistente (ayuda a que no se salga la glasa de las galletas) y la de relleno un poco más líquida.

- La del borde, tiene que tener textura de pasta de dientes. Cuando lo hayamos conseguido, apartamos cantidad para los bordes.

- La de relleno, con lo que sobra, lo ponemos en recipiente diferentes, dependiendo del número de colores que queramos utilizar, y le vamos añadiendo poco a poco agua, hasta que cogiendo un poco con una cuchara, al contar hasta cinco, la glasa que hayamos echado encima del resto, se integre. Luego añadimos los colorantes al gusto.

Para decorarlas, ponemos las diferentes glasas en mangas desechables y las abrimos un poquitito con unas tijeras. Primero usamos la de borde, cogemos la galletas y le hacemos un borde, no hay que tocar la galleta con la manga pastelera, la separamos un poco y con mano firme hacemos los bordes.

Cuando se haya secado un poco, las rellenamos con la otra glasa, esto es al gusto, si vamos a rellenar toda la galleta, lo mejor es empezar por arriba e ir rellenando de lado a lado. Cuando se seque podemos seguir decorando.

GALLETAS DE DEDOS. Son más fáciles de lo que parecen. Cuando tengamos la masa, hacemos la forma de los dedos y le añadimos una almendra. Las metemos en el horno 13-14 minutos y las dejamos enfriar.

Con colorante marrón, en pasta o polvo, cogemos un pincel y las pintamos. Con colorante rojo igual. Están muy muy buenas, las llevé a la fiesta y no sobró nadita!!!

Dedicada:

Al grupo de amigos que se las comió y sobretodo a los anfitriones, gracias por invitarnos!!!

Queque/ Bizcocho de limón y semillas de amapola

Fue a raíz de verlo en una cafetería que me entró curiosidad por este queque, con semillas de amapola. Las busqué en el supermercado y no las encontré así que fui decidida a un herbolario y allí estaban, perfectas. Lo siguiente fue buscar una receta en internet, no vaya a ser que con la receta básica de yogur no quedara bien, para mi sorpresa habían varias. Aquí expongo la que más me gustó, del blog marshmalu. 

Ingredientes:

• 4 cucharadas de semillas de amapola
• 100 gramos de mantequilla derretida sin sal
• 150 gramos de harina de trigo
• 140 gramos de azúcar blanca
• 1/2 cucharada de extracto de vainilla
• 3 huevos
• 1 pizca de sal
• Medio sobre de levadura tipo Royal
• La ralladura de un limón

Glaseado de limón:

• El zumo de 1 limón
• Azúcar glass

Horno, 180 grados, calor arriba y abajo, 30 minutos. Molde engrasado como más nos guste.

Pasos:

En una batidora con varillas mezclamos la mantequilla y el azúcar primero. Luego añadimos el extracto de vainilla y dos huevos.

Seguimos mezclando el tercer huevo, la harina y la levadura tamizadas, la sal, la ralladura de limón y por último las semillas de amapola.

La masa es mucho más compacta que para otros queques al no llevar ningún ingrediente líquido tal como leche o yogur, se nota al terminarla y pasarla el bol, que sería el siguiente paso. Aconsejo alisar un poco la parte superior de la masa una vez esté en el molde. No se nota cuando el queque ya está terminado, queda igual de esponjoso.

Lo dejamos en el horno hasta que salga un palillo limpio, diez minutos en su propio molde y luego lo dejamos terminar de enfriar encima de una rejilla. 

Para el glaseado cogí el zumo de un limón y le fuí echando azúcar glass hasta que me gustó la textura, se lo eché por encima y listo para disfrutar!!!!!

                      

Dedicada:

A mi hijo que le gustan todos, absolutamente todos los queques que hago.